¿OTRA DE MAGOS?
Cuando, hará cosa de un mes o dos, recibí un correo de un tal Sergio Parra (que a mí, para qué les voy a engañar, no me sonaba de nada), ofreciéndose a enviarme (¡gratis!) la última novela que había publicado para que, si lo juzgaba conveniente, la comentase aquí, lo primero que se me ocurrió fue mirar las estadísticas de CPA en busca de un milagro. Busqué en vano: seguíamos teniendo los treinta escasos y maravillosos parroquianos de toda la vida. Y razoné así: "Suponiendo que me guste el libro y la crítica sea positiva, y que más o menos a la mitad de nuestros lectores les apetezca comprarlo, dudo que los beneficios apenas le cubran al señor Parra los gastos de enviar el libro por correo certificado". Así que lo segundo que se me ocurrió fue: "Dios mío, consérvale a este caballero el don de la literatura, si es que lo tiene, porque para los negocios va de culo."Bien, sentada mi opinión sobre la visión comercial de Sergio Parra, que al final es asunto de Sergio Parra y de su banco, vamos a lo que aquí nos interesa: la novela.
Jitanjáfora, que así se llama el libro que nos ocupa, es una novela de magos. Sí, como las de Harry Potter. Pero a las de Harry Potter, que a mí me chiflan, la deja a la altura del betún, porque Jitanjáfora empieza cuestionando la magia del abracadabra y termina por descubrir al lector la magia, mucho más abrumadora, de la condición humana. Con un estilo muy personal (un mestizaje exquisito entre el lenguaje de la calle y los arabescos más cultistas) y como a cuchilladas, con el vocabulario más rico que he tenido la dicha de toparme (en ocasiones me recuerda este chico a mi idolatrado Luis Martín-Santos, el de Tiempo de Silencio, ¿se acuerdan?), cuenta Sergio Parra una historia que es a la vez una inmensa burla y un profundo análisis de todas las estructuras que anquilosan al hombre, desde los cuentos de hadas a la ignorancia y el miedo. Por ponerles un ejemplo: la escuela de magia está situada en un castillo austríaco, cubierto de siglos de tradición y con pesados tapices en el pasillo, símbolo de todo lo venerable, antiguo e inamovible. Pero unos metros más adentro se llega a la auténtica escuela: una gigantesca cámara hermética, aséptica y blanquísima e hirviente de trabajo y de personas que se esfuerzan hasta la extenuación por superar sus límites. Y, entonces, uno comprende la gigantesca broma que representa la cáscara exterior.
De esta novela, con su ritmo implacable y plagada de acontecimientos inesperados, se puede decir lo que de la mayoría no se puede: que después de terminarla uno ya no es el mismo. A pesar de los denodados esfuerzos de la editorial por venderla como un insulto a la inteligencia del lector medio (y el entero), lo cierto es que es una novela capaz de remover creencias arraigadas y prejuicios heredados durante generaciones; y de divertir muchísimo, con un humor sutil y agudo y a veces un poquito soterrado, para que pille de sorpresa. Con Jitanjáfora uno se contagia del entusiasmo de los personajes por ir más allá de sí mismos; por luchar, como Juan Salvador Gaviota, contra los extremos de sus alas, preparando una lucha sin cuartel contra un enemigo que desconocen. Y sabiendo que tal vez ellos no sean los buenos, porque en Jitanjáfora, como en la vida real, a veces no hay buenos ni malos, sino distintas formas de entender el mundo.
Juzguen ustedes mismos: les dejo con algunos de mis fragmentos favoritos de la novela. Pero, por cambiar un poco, esta vez se los voy a leer yo. Perdónenme el sonido pésimo y mis nulas cualidades interpretativas, amén de mi voz de flauta desafinada: la próxima saldrá mejor. Aún así, espero que merezca la pena. Suban el volumen (está muy bajito, si no salía con mucho ruido), cierren los ojos, y disfruten...
Enlaces:
La Orden Jitanjáfora, blog de los alumnos de la Escuela de Magia Laica de Salzburgo.
Ocultando el sol con la cabeza de un alfiler. El blog de Sergio Parra, donde pueden leer sus artículos, fragmentos de novelas, e incluso leer y escuchar Las gafas de Platón (novela) enterita.
La factoría de memes. Un poco de todo, escrito también por Sergio Parra, que él sabrá de dónde saca el tiempo.
Actualización: Jitanjáfora y Frío están en Emule.
Segunda actualización: en este vídeo pueden echar un vistazo al castillo de Ramingstein (Austria), donde se ambienta Jitanjáfora, y al propio Sergio Parra colándose en el mismo sin permiso, a hurtadillas y con cara de cierta preocupación.
Etiquetas: Literatura
16 Comments:
No sé qué pasa, pero en donde deberían estar las grabaciones sólo me aparecen cuadros en blanco.
He probado con el Mozilla Firefox y con el Internet Explorer con idénticos resultados.
Espero con ganas la resolución del problema ;)
Davidmh: el problema es de Goear que, simplemente, ha desaparecido, y con él todas las grabaciones de CPA que estaban alojadas en su página (la mayoría). Sé que estaban instalando una versión nueva, así que tengo la esperanza de que lo arreglen en breve. Anoche, cuando estaba subiendo las grabaciones, ya se esfumaban a veces sin explicación. Por suerte tengo copia de las de esta entrada, al menos: si no consiguen reparar Goear buscaremos un servidor propio y listos. Lo acabaremos haciendo de todas formas...
Les pido paciencia, por favor. Para colmo de males, en media hora tengo que salir para el aeropuerto y no vuelvo hasta el domingo, pero les prometo que buscaré cibercafés para ver cómo va la cosa.
¡¡YAAAAAA!! Ay, qué suhto, qué suhto...
¿Treinta y algo parroquianos? Pues me parece a mí que alguno te dejas... Yo uso el Bloglines para leerte (excepto cuando hay audio embebido o cosas así no suelo entrar a la página), y en la parte superior del feed me dice que tiene 52 suscriptores :-)
¡YUHUUU!... AVENTURAS, DUENDES, HADAS, y todo lo que implica la magia en nuestro subconsciente.
¿QUÉ MÁS SE PUEDE PEDIR?
...Por cierto, ¿me lo prestas, Susa?...Anda, Siiiii?
Gracias Sergio por regalar más de la capacidad sanadora del género fantástico. Os debo algo sobre esto, uno de mis temas preferidos, pero tardará por que aun tengo dos más en la cola de espera. Bueno quien sabe, igual me salto alguna cosa.
Saludos.
Javier: Me alegro un montón de que seamos tantos. Yo lo miré en la página de Ecoestadística y me daba una media de treinta visitas diarias (ojo: esto fue por Navidad o un poco después) redondeando a la baja.
Anonimia: por supuesto que te lo presto. Te va a encantar, aunque te aviso de que Sergio no apela precisamente al subconsciente en esta novela, sino que (y eso es lo más maravilloso de la novela) llega a la magia a través de la razón. Por cierto: desde el viernes tengo en mi poder, guardadas como oro en paño, tres novelas más de Sergio Parra: La Moleskine (casi me la he terminado ya), Bitis y Frío. Te las paso también, si quieres.
Al fin pude escucharlas. Susana, tienes una voz muy bonita, como las jitanjáforas.
¡Ja, ja, ja! Sí, Davidmh, como las jitanjáforas...
¡Joer Susana! qué voz!!
¿No has pensado seriamente en fungir de locutora en alguna estación? O mejor aun: ¿por qué no preparas una versión de audio de tu bitácora?
Por otro lado, el tema del libro y tu resumen ya me llamó la atención. No obstante no se si en México estará disponible en algún momento... T_T
(y creo que habemos más de los que salen en bloglines... después de todo... no todos estamos suscritos) ;)
Mytho: A mí, la verdad, no me gusta cómo queda mi voz, la encuentro demasiado aguda. Así que gracias por el piropo.
¿Una versión audio de CPA? Pinta bien... De momento, estoy tratando de conseguir un programa mejor para grabar. Pero sí, tal vez nos planteemos hacer la versión audio de algunas de las entradas, al menos. A ver cómo va saliendo.
Jitanjáfora, y también Frío, están en Emule.
Todavía (como editor de la novela) estoy pensando en si "venderla como un insulto a la inteligencia del lector medio" es un piropo o un tirón de orejas... me quedo con lo primero.
Me alegro que la novela te gustase, y a todos los demas, seguro que os gustará.
Bueno, Raúl, siento decir que pretendía ser un tironcito de orejas. Me dio la impresión de que se intentaba presentar Jitanjáfora como una segunda Harry Potter, lo cual no es cierto ni de lejos (por suerte). Creo, la verdad, que se ha enfocado a un público menos maduro del que puede digerirla y disfrutarla. "La magia no existe" no es un "original planteamiento": de hecho, no existe. Los personajes no "combaten el Mal", porque una de las tesis del libro es que el Mal y el Bien tampoco existen; y las "criaturas extraordinarias" yo no las he visto por ninguna parte, ni tampoco hacían falta. Con lo del "sarcasmo monumental" sí que me quedo, pero es mucho más: Jitanjáfora es una novela sobre la mente humana, sobre su funcionamiento, su capacidad de autoengaño o de lucidez, sus motivaciones y sus trabas. La contraportada es un "Bueno, no hay magia, pero al menos lo parece", obviando el hecho de que la magia convencional, en esta novela, es precisamente lo que se niega. El lector que acuda al libro en busca de combates contra fuerzas oscuras se aburrirá leyendo sobre "hilos" e "impulsos nerviosos", y el lector que realmente podría disfrutarlo saldrá corriendo ante la posibilidad de una (otra) penosa imitación de Harry Potter.
Expuestas mis razones (por supuesto subjetivas y totalmente personales), quisiera felicitarles (a usted y a Grupo AJEC) por apostar por un escritor como Sergio Parra, y por una novela tan poco convencional como Jitanjáfora. Creo que han acertado de pleno, y que andando el tiempo verán recompensado su esfuerzo.
Sin más, saludos, y gracias por pasar por CPA.
Ejem... espero que sabrá disculparme el atrevimiento señorita, pero tiene usted una voz con curvas. Y tambien muy sonora. Trabajándola un poco podría usted ganarse la vida con ella.
En cuanto al libro, por lo que veo pinta bien. Lo buscaré la próxima vez que vaya a una librería.
Saludos
Vaya, gracias...
Hola de nuevo:
Dado que somos una editorial pequeña, muchisimas gracias. Editar un libro como Jitanjáfora es una inversión y riesgo bastante grande, pero se compensa de sobra por las criticas.
Y luego decirte que me quedo solo con medio tirón de orejas. La contraportada está escrita íntegramente por Sergio Parra, y tal como él concibio la sinopsis, la pusimos;yo simplemente le di el visto bueno.
Tengo muy claro que no es una harrypotada, si fuera asi, la hubiera publicado en la coleccion de literatura juvenil.
Obviamente en una sinopsis de cara a un posible lector hay que conjugar muchos factores, tanto la descripcion de la novela, como hacerla atractiva para el lector; pero dudo que un padre que vaya buscando un libro de Narnia o Harry Potter compre Jitanjafora cuando lea: "toxicomano; marginados sociales; fraks de circo...". Pero soy consciente de que con esta sinopsis "descafeina" atraeremos a lectores que huirian de otro tipo de sinopsis.
Y por último, si que creo que combaten el Mal... pero bien/mal tiene muchas acepciones :)
No me extiendo más, que tiendo a engordar las respuestas. Si quieres tu, o alguien comentar cualquier cosa más en detalle sobre la novela, estaré encantado de hacerlo en el correo grupo_ajec@msn.com
Hola, Raúl:
Estoy de acuerdo en que presentar una novela, y más si es tan compleja y novedosa como Jitanjáfora, no es tarea en absoluto fácil. Asimismo, estoy segura de que ustedes saben hacer perfectamente su trabajo sin que yo venga a indicarles cómo hacerlo, lo que no es de ninguna forma mi intención. Simplemente, doy mi opinión particular como lectora.
Comenta usted que la contraportada fue escrita por el autor. De acuerdo: pero no corresponde al autor, hasta donde yo sé, diseñar la estrategia de presentación de la novela. Ese es el papel de la editorial, y es por eso que a ustedes he dirigido mis objeciones. Por otra parte, el enfoque en la presentación de un libro es por sí mismo un tema subjetivo: En este caso se ha elegido una vía que a mí no me convence, pero no por ello deja de ser válida.
De cualquier forma, espero que mi punto de vista, expresado en la reseña, sirva para más complementar
que para cuestionar el adoptado por ustedes, y abrir así rango de lectores posibles para Jitanjáfora.
Gracias por dejarnos su correo: aquí queda para el uso de los lectores.
Saludos.
Publicar un comentario
<< Home